Vistas de página en total

viernes, 20 de septiembre de 2019

Cabo San Pablo, la costa Atlántica de la Tierra del Fuego.

En el día 10 de febrero de este año, partiendo del pueblo de Tolhuin viajamos hasta el Cabo San Pablo ubicado sobre la costa Atlántica de la isla Tierra del Fuego. Todo dentro de nuestra extensa expedición por toda la Patagonia Andina con trayecto Ushuaia - San Martin de los Andes. Hicimos lo correcto en alquilar un auto en aeropuerto de Ushuaia que nos permitió explorar buena parte de la isla, llegando a un lugar tan lejano y de difícil acceso como es el caso de este cabo.



El Cabo San Pablo, se encuentra sobre la costa Atlántica de la isla Tierra del Fuego.

https://www.google.com.ar/maps/place/Nueva+Baliza+Bahía+San+Pablo/@-54.285




Ya estuvimos dos días en Ushuaia, un día entero en Tolhuin y el finalizar la exploración del Cabo San Pablo nos tocaba volver a Ushuaia donde nos quedaríamos por dos días mas. La distancia total desde Tolhuin hasta el Cabo San Pablo es de 80 kilómetros. De los cuales 34 km por la RN3 y 46 km mas por una ruta de ripio hasta llegar al cabo.

Justo nos tocaron varios días helados con frió polar, con apenas 4 grados de máxima e incluso pudimos disfrutar de mas de una nevada en pleno verano austral, que es algo común en la parte sur de la isla y que ni si quera sorprende a los pobladores locales.

En primer tramo yendo hacia el Norte en dirección hacia Rio Grande se observa una región de transición desde las sierras pre andinas hacia la llanura y desde una región del bosque magallanico siempre verde hacia una estepa semi árida. Pero mucho antes de completarse la zona de transición, se desvía hacia la derecha por un camino de tierra en dirección hacia el Cabo San Pablo.

Son 46 kilómetros literalmente en medio de la nada. Tan solo verán tres estancias agrícolas de estilo ingles a una distancia de 10-15 km una de otra, y que son idénticas a las estancias kelpers de las Islas Malvinas. El ecosistema que nos acompaño durante todo el camino y que duro cerca de una hora es un bosque de transición con arboles de baja altura y con una topografía ondulada, donde varían pequeños cerros de no mas de 100 metros de alto, pero que sin embargo mantienen su encanto único de esta parte de Tierra del Fuego.







Una estancia de origen y estilo británico en el camino de ripio hacia el Cabo San Pablo.




A mitad del camino hubo una notable nevada veraniega, que termino tan pronto como empezó. Algo normal para el clima cambiante y muy inestable de la parte sur de la isla. Durante todo el camino pudimos ver manadas de guanacos que se multiplican sin limites en la isla debido a la total ausencia de los depredadores, ya que los pumas quedaron a otro lado del estrecho de Magallanes.



Los guanacos que se ven en el camino.




Después de una hora de viaje finalmente llegamos hacia nuestro destino. Y lo que vieron nuestros ojos fue tan espectacular que supero todas nuestras expectativas. Los colores, la topografía serrana del lugar y la costa atlántica sur combinada con un clima extremadamente hostil y ventoso te hacen sentir estar en otro planeta.

Pero para apreciar al máximo este bello lugar había que subir a la cima del pequeño cerro de 130 metros de alto arriba del cual se ubica el famoso faro del Cabo San Pablo. Un breve trekking de no mas de 25 minutos y ya estábamos arriba disfrutando de una vista espectacular y de otro mundo.

En la cima del cerro se podía ver el antiguo farro que estaba inclinado y al borde del colapso a causa de un terremoto hace medio siglo atrás.










A pocos kilómetros del Cabo San Pablo. Y muy cerca de la costa del mar.




La vista que se abría era de una belleza inimaginable que nos permitía observar decenas de kilómetros de la costa fueguina. Mientras el clima era tan cambiante que en menos de una hora se nos daban todas las épocas del año literalmente. Al nublarse el cielo y levantarse un viento de fuerza impresionante la sensación térmica bajaba tanto, que solo podías soportar el ambiente local gracias a nuestra ropa térmica de alta montaña, encapuchando la carra para resguardar el calor corporal contra el viento feroz. Pero al rato, en menos de 10 minutos salia el fuerte sol veraniego, bajaba el viento y ya fue necesario abrir la campera a causa del calor. 10 minutos mas y otra vez se nublaba el cielo y se levantaba el viento y otra vez se sentía el frió polar.



La costa Atlántica de la Tierra del Fuego, a 500 metros del Cabo San Pablo.








Una de las playas mas australes del mundo. A metros del Cabo San Pablo.




















Subiendo al cerro del Cabo San Pablo. Son 130 metros a nivel del mar.
























En la cima del cerro del Cabo San Pablo, frente al antiguo faro inclinado a causa del terremoto.





Un breve vídeo que filmamos en el Cabo San Pablo.




El clima del Cabo San Pablo es muy diferente al de Ushuaia y Tolhuin que están protegidos por las montañas de los vientos devastadores y aunque sus temperaturas son bajas, allí el viento no es tan extremo. Pero en el cabo todo esta abierto, no hay altas montañas y los vientos son feroces y permanentes. Es un clima muy similar al de las Islas Malvinas, lugar que no es nada sencillo para la vida humana.





Una visita a la playa antes de partir de regreso hacia Ushuaia.




Un clima mas extremo aun dentro de las fronteras de nuestro país, y fuera de Antártida Argentina,  solo podrán encontrar en la península Mitre de la Tierra del Fuego y por supuesto en la Isla de los Estados donde es extremadamente hostil. Destinos casi inaccesibles que algún días nos encantaría conocer y explorar.

El lugar es increíblemente solitario. Estuvimos allí mas de dos horas y en todo este tiempo apenas vimos a unos 4 o 5 turistas. Y es comprensible, ya que debido a su lejanía y la total falta de difusión turística, muy pocos exploradores llegan hasta el cabo. Lo que desde luego lo convierte en un destino aun mas atractivo.




En nuestro regreso hacia Ushuaia hicimos una breve parada para despedirnos con el lago Fangnano.







Después de dos días de intensas nevadas, las montañas sobre la RN3 quedaron cubiertas de blanco.




En la segunda mitad del día, al explorar bien este maravilloso y tan poco conocido lugar, emprendimos nuestro camino de regreso hacia Ushuaia. Eran 190 kilómetros de distancia que significaban mas de 3 horas de viaje por una de las rutas mas bellas del país. En Ushuaia aun nos quedaban dos días completos para seguir explorando la isla.




Por Artem Reshentyak.

5 comentarios:

  1. Muy buen blog chicos!!! Sigan asi.

    ResponderEliminar
  2. Grande Artem!! Felicidades chicos!!

    ResponderEliminar
  3. Gracias, la verdad que Argentina tiene muchos lugares hermosos para conocer!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tenemos posiblemente el país mas lindo del mundo en cuanto a la belleza y diversidad natural. Y todavia hay muchos lugares, sobre todo en Patagonia que están casi desconocidos para el común de la gente.

      Eliminar